julio 19, 2012

¿Que es el Hombre?


¿Qué es el Hombre?

Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos,
la luna y las estrellas que tú formaste,
digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria,
y el hijo del hombre, para que lo visites?
Le has hecho poco menor que los ángeles,
y lo coronaste de gloria y de honra.
Salmo 8:3-5.

Creó Dios al hombre a su imagen.
Génesis 1:27.

La ciencia propone varias teorías sobre la aparición del hombre en el vasto cuadro del tiempo, pero deja sin respuesta las preguntas centrales que nos preocupan: ¿Por qué el hombre? ¿Quién es el hombre?


El ser humano descubre estar cerca del animal por su fisiología, pero dado a su mente alcanza una dimensión muy diferente. Es capaz de reflexionar sobre sí mismo. Se pregunta por su identidad y su destino. Tiene una conciencia que lo reprende cuando obra mal. La realidad de la conciencia se halla en todas las civilizaciones y en todas las épocas.

Para saber verdaderamente lo que es el hombre, es necesario creer lo que Dios dice en su Palabra y ésta afirma que fuimos creados a imagen de Dios. Por esa razón somos llamados a vivir en relación con nuestro Creador. Nuestra verdadera nobleza no se basa en nuestra inteligencia, cultura o capacidades, sino en conocer a Dios realmente por la fe.

La Escritura revela que nuestros pecados nos separan de Dios. Por eso Jesús vino a nuestro mundo. Por amor cargó con todas nuestras faltas en la cruz, para que esa separación fuera quitada. Ahora, por la fe, podemos conocer a Dios de una manera nueva, profunda, inalterable, podemos conocerle como nuestro Padre.

http://www.elversiculodeldia.com/

abril 30, 2012

Los Limpios de corazón

Mateo 5:8


Un corazón limpio.¿qué será eso?
Yo bien entiendo lo que es un vaso o un plato limpio.No recomendaría usar una taza sucia para servir comida. Bañarme y cepillarme los dientes es un aseo de todos los días.En Costa Rica,donde vivo yo,el Ministerio de Salud vigila estrictamente en manejo de alimentos para el consumo humano.Ellos entienden bien que los alimentos contaminados son causa de parásitos y son perjuiciosos para la salud.Pero ,¿de que se trata un corazón limpio?.
La lucha contra la contaminación moral también es un tema común.Es un asunto mundial.Constantemente hay campañas para combatir el abuso sexual y las causas de las enfermedades víricas como el SIDA.La corrupción por causa de las drogas,la agresión domésticas,y la violación general de los derechos humanos son temas de primera plana.Se han creado muchas leyes con el fin de controlar la contaminación moral.¡Cuánto dinero y cuántos esfuerzos se han invertido en tratar de combatir esa contaminación!.
Pero asuntos que tratan el corazón...Yo nunca he escuchado de una ley humana que trate este problema.Con tal de que yo no descargue mi ira sobre mi prójimo,para el enojo en mi corazón no existe ninguna ley.Mientras el hombre no llegue a los extremos de sátiro o ladrón,el problema de "ver y desear" no se trata.Sentir el deseo de engañar al prójimo no tiene ley,con tal de que yo no le cause ningún perjuicio.pero,¿en realidad no hay ley contra esto?Sigue leyendo.
Aún es de interés de que en el Antiguo Testamento,la ley de Moisés no impuso ningún castigo por causa de pecados del corazón.Dios sí habló mucho a su pueblo en cuanto amarle de todo corazón y al prójimo como a sí mismo.También pidió que tuvieran un corazón perfecto para con él;pero los castigos se pronunciaron sólo por delitos físicos y morales.¿Quiere decir esto que no hay castigo por pecados del corazón?Vea lo siguiente.
Volvamos ahora a nuestro texto:"un corazón limpio".Jesús estaba en un monte de Galilea, enseñándoles a sus discípulos verdades eternas acerca del reino de Dios.Comenzó a enumerar características,nadie entrará al reino de los cielos;es decir,nadie verá a Dios.Veamos lo que dice Jesús en Mateo 5:8 "Bienaventurado los de limpio corazón,porque ellos verán a Dios".
¿Qué es un corazón limpio?¿A qué se refiere Jesús cuando habla del corazón?Al estudiar los pasajes en el Nuevo testamento donde se hace mención del corazón,fácilmente se nota que no refiere al órgano de carne de nuestro sistema circulatorio.Es más bien el centro o base espiritual de un complejo de cualidades que Dios nos ha dado como creación suya,creados a su imagen.Jesús dice que el corazón es el terreno o el lugar donde depositamos todo lo que estimamos como algo de mucho valor(Lucas 6:45).El repetidas veces hace referencia a esto,explicando que lo que nosotros retenemos en este tesoro,luego brota y sale en forma de palabras y hechos.Lo que está en el corazón (como los pensamientos,las intenciones,la voluntad,el carácter,el entendimiento,y los deseos)nos dominan(Marcos 7:20-23.Mateo12:34).Es decir,del corazón provienen los hechos y las palabras que dominan todo nuestro ser,o para bien o mal.
Volvamos ahora a nuestra pregunta:¿"Qué es un limpio corazón?""Limpio"significa "ser libre de mezclas impuras".A la luz de lo que es el corazón y de lo que significa limpio,veamos con más detalles lo que es un corazón limpio.
Primero,un limpio corazón es tener intenciones y pensamientos libres de motivos y maquinaciones pecaminosos.Tales pensamientos serán únicamente para bien del prójimo y para la exaltación de Cristo.¿Quiere decir esto que si yo maquino el mal en mi mente,seré culpable ante Dios?Sí.Las guerras y los argumentos que yo armo en mi mente en contra de mi hermano y la mera intención de exaltarme,nacen todos de un corazón contaminado Dios lo ve como si ya hubiera cometido el hecho.
Un limpio corazón quiere decir que mi voluntad está totalmente entregada a lo que Dios quiere.Está libre de la obstinación,de las excusas,de la rebeldía contra Dios,y de mis propios deseos.Jesús en el Getsemaní nos da un ejemplo genuino de una voluntad limpia.El oró,y no dejó de orar hasta que su propia voluntad no fuera dominada y que la voluntad de su Padre fuese su único y solo deseo.Hebreos 5:7-8 nos dice que Cristo,después de ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas,fue oído a causa de su temor reverente.Así ganó la victoria sobre su propia voluntad.EL se mostró limpio porque la voluntad de su Padre llegó a ser exclusiva voluntad.
El limpio corazón es el asiento de un carácter libre de orgullo,del odio,y de las reacciones carnales.Produce,más bien,un espíritu afable y apacible(1Pedro 3:4).Y produce no sólo eso,sino todas las virtudes del Espíritu Santo.Es el adorno de amor,gozo,paz,paciencia,benignidad,bondad,fe,mansedumbre,y templanza(Gálatas 5:22-23).De tal corazón no puede brotar agua dulce y amarga a la vez.¿Porqué no?Porque está limpio.
Del limpio corazón brotan los sentimientos de tristeza no fingida  por mis pecados.Dentro de mí,en el corazón,arden la indignación,el temor,,y el celo santo por causa de haber pecado contra Dios.(2Corintios 7:10-11).además,el corazón limpio produce el gozo y la paz inefable aun en medio de pruebas.El corazón limpio goza de un sentimiento de amor y compasión para con aquel que nos hace mal.Es un sentimiento libre de murmuraciones,quejas,y un espíritu de venganza.El limpio de corazón produce sentimientos llenos de gracia y agradecimiento a Dios.De tal corazón brotan la alabanza y las acciones de gracias a Dios.(Colosenses 3:16).
El limpio corazón es una blandura de espíritu en que el Espíritu Santo puede con toda libertad transformar e iluminar mi entendimiento(Romanos 12:2).No ay en él ningún contaminante de dureza y envanecimiento que haga entenebrecer mi mente(Romanos 1:21.Efesios 4:18).¡Qué buen terreno es el entendimiento limpio para la semilla de la Palabra de Dios!.En él nace la semilla al cien por ciento y cosechará igual.Pero,¡qué infructuosa la tierra del entendimiento duro!(Mateo 13:19).¡Cómo anhelo yo tener el entendimiento limpio y blando de manera que el Espíritu de vida pueda escribir en él su leyes eternas!(Hebreos 8:10).
Finalmente,el limpio corazón está libre de los inmundos y las pasiones vergonzosas de la carne(Romanos 1:24.Tito 1:5).Es decir,el corazón limpio produce deseos puros.Se viste del Señor Jesucristo y no provee para los deseos de la carne(Romanos 23:14).Su fuerte deseo es agradar a Dios y honrarle sólo a él.
¿Por qué es necesario un limpio corazón?Jesús repetidas veces en los evangelios advierte de limpiezas insuficientes.Son limpiezas que jamás reunirán los requisitos para ver a Dios.El trata de hipócrita al que limpia el vaso y el plato por fuera solamente(Mateo 23:25-26).El reprende a los fariseos por poner su confianza en lavamiento y purificaciones del cuerpo físico.(Marcos 7:8).Enseña claramente que aun guardar los diez mandamientos del Antiguo Testamento en su forma externa solamente,no basta para ser salvos(Mateo 5:21-48).El enseña una ley nueva que llega al grano del problema del ser humano,que trata con el corazón.Esa ley nos juzga desde los pensamientos y las intenciones del corazón(Hebreos 4:12).
En Mateo 5:21-37 Jesús refiere a los mandamientos:"No matarás,no cometerás adulterio,y no perjurarás".Pero él hace ver claramente que Dios ve estos pecados y nos juzga desde el momento en que son concebidos en el corazón.El ve el enojo,el rencor,el deseo por la mujer ajena,y la intención de mentir aun antes que salen en hechos y palabras.
La historia del joven rico en Mateo 19:16-22 es un ejemplo de esto.El creía guardar los diez mandamientos al pie de la letra.Dentro de sí él pensó:¿Qué más me pudiera faltar?"Pero Jesús conocía los deseos de su corazón.El se dirigió directamente al grano del problema del joven;en su corazón había el amor al dinero.Con esto,jamás obtendría la vida eterna.
¿Has pensado alguna vez en las ceremonias externas como una forma de limpieza espiritual?¿Habrá alguna agua lo suficiente sagrada o bendita como para purificarnos ante los ojos de Dios?¿Pudo la sangre de miles de carneros limpiar la conciencia de la gente en el Antiguo Testamento?¿Me serviría de algo el agua del bautismo para llegar a ver a Dios si todavía en mi corazón guardo mi propia voluntad y malos deseos?¿Bastaría el vestido blanco para justificar a la novia como virgen cuando al mismo tiempo hay fornicaciones e intenciones impuras en su corazón?¿Podrá la alabanza o el testimonio emocionante en el culto,o algún don espiritual que yo luzca justificar problemas sin resolver en mi corazón?Sin Santidad "nadie verá al Señor"(Hebreos12:14).
¡Cuán difícil es tratar de limpiar lo de afuera si el corazón aún está habituado a hacer el mal!(Jeremías 13:23).Es como el ladrón que quiera dejar de robar mientras en su corazón está el deseo para lo ajeno.O como la pareja de esposos que quieran dejar de pelear sin haberse arrepentido del orgullo y egoísmo en su corazón.
Pero hay otra cosa más problemática o quizá más peligrosa aun que esto.Es el engaño de sentirme bien o creerme preparado para encontrarme con Dios sin haber tratado con el problema básico,mi corazón contaminado.Quizá cruzo unas cuantas palabras de enejo con mi esposa,mi hijo,o mi hermano.Luego paso unos días,sintiéndome molesto,pero con el tiempo le echo tierra.¿Bastará con dejar pasar el tiempo para borrar mi culpabilidad?No.Si no humillo mi corazón ante Dios y mi prójimo para pedirle perdón,no veré a Dios.
¿Bastará con arreglar un problema que tengo apenas lo suficiente para sentirme mejor,o confesar s´lo lo que ha salido a la luz?¿Qué tal el hombre que siente como si ha nacido de nuevo después de haberse librado del vicio del licor o la droga,pero que no está dispuesto en su corazón a entregar a Dios su voluntad por completo y obedecer a Dios en todo?¿Verá tal persona a Dios?¡Jamás!.
Hay sólo un camino en que podamos asegurarnos para ver e Dios.Esto es tratar con nuestro corazón.Salmos 51:17 nos enseña que Dios recibe al corazón contrito y humillado.El profeta Isaías anuncia que Dios hace vivificar al corazón de los quebrantados(Isaías 57:15).En Santiago 4:8,Dios advierte a los de doble ánimo:"Purificad vuestros corazones".
Veo una cosa más en nuestro texto de Mateo 5:8.Es la dicha y la recompensa que gozarán los de limpio corazón.Ellos verán a Dios.Para mi esa es una dicha incomparable.No la quiero perder por nada en este mundo.Poder alzar mis ojos y con gozo recibir a Jesús cuando venga en las nubes,será recompensa suficiente por tener un limpio corazón.Pero él ha prometido aun mucho más.Podremos estar con él por toda la eternidad y participar de su gloria(Juan 17:24).El hecho de estar en su presencia,delante de su trono,y contemplar su rostro será una experiencia sin comparación.
Vea conmigo estas palabras alentadoras de Apocalipsis 7:9-17."Después de esto miré,y he aquí una gran multitud,la cual nadie podía contar,de todas naciones y tribus y pueblos,que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero,vestidos de ropas blancas,y con almas en las manos...Estos son los que han salido de la gran tribulación,y han lavado sus ropas,y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.Por esto están delante del trono de Dios...y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos...el Cordero que está en  medio del trono los pastoreará,y los guiará a fuentes de aguas de vida;y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos".
¡Fuera este mundo con sus ilusiones y su gloria!¡Desvanezca su brillantez a la luz de la gloria venidera de los hijos de Dios!¡Avergüencese mi corazón lleno de huesos de muertos y de toda inmundicia!¡Quebrántese mi corazón de su dureza y arrepiéntase de su injusticia!¡Tiemble mi corazón ante aquellas palabras que aún resuenan desde aquel monte en Galilea:"Bienaventurados los de limpio corazón,porque ellos verán a Dios"!.


Pablo Schrock.

abril 29, 2012

La figura de Cristo en la vida de José


INTRODUCCIÓN
José el gran soñador, un hombre que vio su futuro a través de sueños, y aunque las cosas que venían a su vida no parecían tan buenas como sus sueños, nunca dejó de soñar y nunca dejó de confiar en aquel que le daba sus sueños, y sus sueños al final, se volvieron realidad.
A través de la Biblia, y sobre todo en el Antiguo Testamento, existen innumerables historias de los hombres que fueron forjando la historia del pueblo de Israel. Podemos leer de corrido cada una de esas historias y verlas como relatos interesantes, o podemos enfocarnos un poco más en ellas y encontrar grandes verdades y principios que podemos aplicar a nuestras vida.
Pero también en esas historias existen sombras de lo que un día habría de venir, es como ver la misma película pero con personajes diferentes en lugares diferentes, a eso se le llama "tipos".
Un tipo es una sombra que proyecta una verdad de la historia del Antiguo Testamento a la realidad o cumplimiento en la revelación del Nuevo Testamento<i>.
Los tipos del Antiguo Testamento incluyen personas, funcionarios, objetos, acontecimientos, ritos, lugares e instituciones que, además de su propio valor significativo, prefiguraban a alguien o a algo por venir<ii>
Podemos ver a Cristo reflejado en cientos de tipos diferentes a lo largo del Antiguo Testamento. Por ejemplo lo podemos ver en: la roca de Horeb, en la serpiente de bronce, en el maná, en Adán, en Melquisedec, en la pascua, en Isaac, y por supuesto también en José.
Y de eso trata este estudio, vamos a buscar los tipos de Cristo en la vida y obra de José el gran soñador, y nos daremos cuenta que estudiando un poco más a detalle ese gran libro llamado La Biblia, podemos encontrar más que bonitas historias, más que principios y verdades aplicables a nuestra vida: podemos encontrar a Cristo, y al encontrar a Cristo podremos encontrar más para nosotros mismos... nuestra salvación.
¿QUIÉN FUE JOSÉ?
José, hijo de Jacob, el patriarca, fue el hijo numero 11 por descendencia total y el primero que tuvo con Raquel (su mujer amada y tal vez por lo tanto su hijo predilecto). Nació en Padan-aram (llanura de Aram), lugar de la antigua Mesopotamia, hoy Irak.
De niño se trasladó con toda su familia a Palestina donde vivió hasta los 17 años. Debido al amor que su padre le mostraba, generó tantos celos en sus hermanos al grado tal que un día lo vendieron como esclavo a unos mercaderes por 20 piezas de plata.
Su padre creyó que había muerto, pues sus hermanos mancharon con sangre su túnica para aparentar que un león lo había atacado, pero en realidad fue llevado a Egipto donde fue vendido a Potifar, capitán de la guardia del faraón. Y gracias a su inteligencia y honradez en poco tiempo llegó a ser mayordomo de la casa de Potifar. Pero debido a la calumnia de la mujer del capitán, lo encarcelaron.
En la cárcel, fue nombrado el guardián de todos los presos. Ahí tuvo oportunidad de interpretar 2 sueños, el del copero y el del panadero del faraón. Gracias a la exactitud de esto, varios años después fue llevado ante Faraón para interpretar sus sueños. De esta forma llego a ser primer ministro en el gobierno de esa nación, y bajo su mano Egipto prosperó extraordinariamente.
En los tiempos en que José gobernaba en Egipto, hubo una gran escasez de alimentos, por tanto aun los pueblos vecinos tenían que ir a Egipto a comprar alimentos. Y entre ellos estuvieron los hermanos de José.
José reconoció a sus hermanos cuando llegaron, pero para probarlos hizo como que no los conocía y les hablo ásperamente, y con una serie de artimañas y trucos manifestó su deseo de conocer al hijo menor de su padre Jacob, Benjamin.
En una nueva visita de sus hermanos en busca otra vez de pan, José se reveló a ellos nos sin antes probar sus corazones. Después de esta visita, hizo traer a su padre y a sus hermanos para vivir en la región más rica del país.
Al morir Jacob, sus hermanos temieron que José pudiera vengarse de ellos. Sin embargo, José demostró que los había perdonado y les mostró su verdadero amor.
LOS TIPOS DE CRISTO EN LA VIDA DE JOSE
Algunas de las figuras, sombras o tipos de Cristo en la vida de José que estaremos viendo son las siguientes:
Hijo primogénito
Era el hijo amado de su padre
Tuvo que ir a Egipto
Tuvo dos nombres
Testificó contra el pecado de sus hermanos (y éstos lo odiaron)
Fue traicionado por sus hermanos
Fue vendido por piezas de plata
Fue tentado y pasó con éxito la prueba
Fue puesto en el lugar de muerte con otros dos criminales
Uno de los criminales murió y el otro vivió
Fue levantado del lugar de muerte por el rey
Fue investido de autoridad y poder
Llegó a ser el libertador de su pueblo
HIJO PRIMOGENITO
José fue el hijo primogénito de Raquel.
Jesús fue el hijo primogénito de María.
ERA EL HIJO AMADO DE SU PADRE
José fue durante toda su vida el hijo amado de su padre (Gen 37:3 "Israel quería a José más que a sus otros hijos").
Jesús fue el hijo amado de su Padre (Lc 3:22 "Tú eres mi Hijo amado, a quien he elegido")
TUVO QUE IR A EGIPTO
José al ser vendido como esclavo fue llevado a Egipto (Gen 37:28 "Así se llevaron a José a Egipto")
Jesús cuando era un niño, fue llevado a Egipto para evitar que Herodes el Grande lo matara (Mt 2:14 "José se levantó, tomó al niño y a su madre, y salió con ellos de noche camino de Egipto")
TUVO DOS NOMBRES
José tuvo dos nombres, uno hebreo y uno egipcio (Gen 41:45 "El faraón le puso a José el nombre egipcio de Safenat-panéah")
Jesús tuvo dos nombres, uno representaba su divinidad y el otro su humanidad (Mt 1:23 "al que pondrán por nombre Emanuel"; Lc 2:21 "y le pusieron por nombre Jesús")
TESTIFICO CONTRA EL PECADO DE SUS HERMANOS (Y ESTOS LO ODIARON)
José testifico contra el pecado de sus hermanos y estos le odiaban (Gen 37: 2 "Y José llevaba a su padre quejas de la mala conducta de sus hermanos")
Jesús testifico contra los hombres y lo odiaron por ello (Jn 7:7 "Los que son del mundo no pueden odiarlos a ustedes; pero a mí me odian, porque yo hago ver claramente que lo que hacen es malo")
FUE TRAICIONADO POR SUS HERMANOS
José fue traicionado por sus hermanos, que lo despojaron de su túnica y lo arrojaron en un pozo.
Jesús fue traicionado por un amigo que era más cercano que un hermano.
FUE VENDIDO POR PIEZAS DE PLATA
José fue vendido por Judá por 20 piezas de plata (Gen 37:28 "y lo vendieron a los ismaelitas por veinte monedas de plata")
Jesús fue vendido por Judas por 30 piezas de plata (Mt 26:15 "Ellos le pagaron treinta monedas de plata")
FUE TENTADO Y PASO CON ÉXITO LA PRUEBA
José fue tentado y no cedió, pasando satisfactoriamente la prueba (Gen 39:7-12 "así que después de algún tiempo la esposa de su amo se fijó en él, y un día le dijo: Acuéstate conmigo. Pero José no quiso, y le contestó: Mire usted, mi amo ha dejado a mi cargo todo lo que tiene, y estando yo aquí, no tiene de qué preocuparse. En esta casa nadie es más que yo; mi amo no me ha negado nada, sino solo a usted, pues es su esposa; así que, ¿cómo podría yo hacer algo tan malo, y pecar contra Dios? Y aunque ella insistía con José todos los días para que se acostara con ella y estuviera a su lado, él no le hacía caso. Pero un día José entró en la casa para hacer su trabajo y, como no había nadie allí, ella lo agarró de la ropa y le dijo: Acuéstate conmigo. Pero él salió corriendo y dejó su ropa en las manos de ella")
Jesús fue tentado por Satanás y no cedió (Mt 4: 1-11 "Luego el Espíritu llevó a Jesús al desierto, para que el diablo lo pusiera a prueba. Estuvo cuarenta días y cuarenta noches sin comer, y después sintió hambre. El diablo se acercó entonces a Jesús para ponerlo a prueba, y le dijo: Si de veras eres Hijo de Dios, ordena que estas piedras se conviertan en panes. Pero Jesús le contestó: La Escritura dice: 'No solo de pan vivirá el hombre, sino también de toda palabra que salga de los labios de Dios.' Luego el diablo lo llevó a la santa ciudad de Jerusalén, lo subió a la parte más alta del templo y le dijo: Si de veras eres Hijo de Dios, tírate abajo; porque la Escritura dice: 'Dios mandará que sus ángeles te cuiden. Te levantarán con sus manos, para que no tropieces con piedra alguna.' Jesús le contestó: También dice la Escritura: 'No pongas a prueba al Señor tu Dios.' Finalmente el diablo lo llevó a un cerro muy alto, y mostrándole todos los países del mundo y la grandeza de ellos, le dijo: Yo te daré todo esto, si te arrodillas y me adoras. Jesús le contestó: Vete, Satanás, porque la Escritura dice: 'Adora al Señor tu Dios, y sírvele solo a él.' Entonces el diablo se apartó de Jesús, y unos ángeles acudieron a servirle").
FUE PUESTO EN EL LUGAR DE MUERTE CON OTROS DOS CRIMINALES
José fue puesto en el calabozo, lugar de muerte con otros dos criminales (Gen 40:1-3 "Después de esto, el copero, o sea el encargado de servirle vino al rey, y también el panadero, ofendieron a su amo, el rey de Egipto. El faraón, o sea el rey, se enojó contra estos dos funcionarios, el jefe de los coperos y el jefe de los panaderos, y los mandó presos a la casa del capitán de la guardia, donde estaba la cárcel. Era el mismo lugar donde José estaba preso").
Jesús fue puesto en la cruz, lugar de muerte con dos criminales (Mc 15:27 "Con él crucificaron también a dos bandidos, uno a su derecha y otro a su izquierda").
UNO DE LOS CRIMINALES MURIO Y EL OTRO VIVIO
Con José, uno de los criminales murió y el otro vivió (Gen 40:21-22 "Al copero lo puso de nuevo en su trabajo, y él volvió a darle la copa al faraón, como antes; pero al panadero lo mandó ahorcar, tal como José lo había interpretado")
Con Jesús, uno de los criminales murió y el otro vivió (Lc 23:39-43 "Uno de los criminales que estaban colgados, lo insultaba: ¡Si tú eres el Mesías, sálvate a ti mismo y sálvanos también a nosotros! Pero el otro reprendió a su compañero, diciéndole: ¿No tienes temor de Dios, tú que estás bajo el mismo castigo? Nosotros estamos sufriendo con toda razón, porque estamos pagando el justo castigo de lo que hemos hecho; pero este hombre no hizo nada malo. Luego añadió: Jesús, acuérdate de mí cuando comiences a reinar. Jesús le contestó: Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso")
FUE LEVANTADO DEL LUGAR DE MUERTE POR EL REY
José fue levantado del lugar de muerte (el calabozo) por el rey de la tierra (Gen 41:14 "Entonces el faraón mandó llamar a José, y lo sacaron inmediatamente de la cárcel.")
Jesús fue levantado de la muerte (en la cruz) por el Rey del universo (Col 2:12 "Al ser bautizados, ustedes fueron sepultados con Cristo, y fueron también resucitados con él, porque creyeron en el poder de Dios, que lo resucitó")
FUE INVESTIDO DE AUTORIDAD Y PODER
José fue envestido por el faraón con autoridad y poder (Gen 41:40 "Tú te harás cargo de mi palacio, y todo mi pueblo obedecerá tus órdenes. Solo yo seré más que tú, porque soy el rey").
Jesús tenia toda el poder que su padre la había dado. (Mt 28:18 "Jesús se acercó a ellos y les dijo: Dios me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra")
LLEGO A SER EL LIBERTADOR DE SU PUEBLO
José fue libertador de su pueblo (Gen 47:25 "Y ellos contestaron: Usted es muy bondadoso con nosotros, pues nos ha salvado la vida")
Jesús vino a ser el Salvador de su pueblo (1 Tim 4:10 "Por eso mismo trabajamos y luchamos, porque hemos puesto nuestra esperanza en el Dios viviente, que es el Salvador de todos, especialmente de los que creen").
Conclusión:
Jesús aparece con muchas figuras o tipos en todo el antiguo testamento. En el caso de José muchos de los sucesos en la vida de este siervo de Dios están relacionados casi directamente con Jesús. Podemos mirar a José como un varón que se acerco mucho a la estatura de Cristo y tomarlo como un ejemplo a seguir.
BIBLIOGRAFÍA
Todos los versículos citados fueron tomados de la Biblia: Dios Habla Hoy - La Biblia de Estudio, Sociedades Bíblicas Unidas, EUA, 1998.
Biblia de referencia Thompson, Editorial Vida, Deerfield, Florida, EUA, 1991
Tu andar diario, Editorial UNILIT, Miami, Florida, EUA, 1994
Portraits of Christ in Genesis (Semblanza de Cristo en Génesis), Zondervan Publishing House, EUA, 1966
CITAS USADAS
i Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia, Editorial Caribe, p.1144
ii Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia, Editorial Caribe, p.1144


Pablo, el modelo de un ministerio


Por RV Marker.

Estudiando la segunda carta del apóstol Pablo a los Corintios encontramos a través de Pablo las siguientes características de un ministerio  y/o del ministro.

Buen comportamiento: Pablo estaba orgulloso de su comportamiento, ya que su conciencia le decía que se había portado limpia y sinceramente. Además de que les estaba dando una oportunidad a los Corintios de sentirse orgullosos de él, para que pudieran contestar a quienes presumen de las apariencias y no de lo que hay en el corazón.

Ser de Influencia: Poder influir con nuestro ejemplo en el comportamiento de otros, no dar mal ejemplo a nadie, para que nuestro trabajo no caiga en descrédito.

Ser un reflejo de Cristo: Todos nosotros debemos ser como un espejo que refleja la gloria del Señor, y vamos transformándonos en su imagen misma, porque cada vez tenemos más de su gloria.

Confiar en la Gracia de Dios: También notamos que Pablo no se dejaba guiar por la sabiduría humana, sino que confiaba en la gracia de Dios.

No ser fluctuante: En su hablar, como en su actuar, el ser fluctuante diciendo "sí" y "no" al mismo tiempo, no da testimonio de Cristo. Porque Jesucristo, el Hijo de Dios, no fue "sí" y "no" al mismo tiempo. Dios ha dado en Cristo para siempre su "sí", pues en él se cumplen todas las promesas de Dios.

Consagración: Dios nos afirma al unirnos a Cristo, y nos ha consagrado. Nos marca con su sello, y ha puesto en nuestro corazón al Espíritu Santo.

Pensar en el bien de los otros: Pablo comenta que decidió no hacerles otra visita a los Corintios que les pudiera causar tristeza. Como dice Pablo: "Porque si yo los entristezco, ¿quién hará que me sienta alegre, de no ser ustedes, a quienes he entristecido?". Además de que siempre pensaba en las iglesias, y se preocupaba por ellas, a tal grado que si alguien enfermaba, él se sentía enfermo por ello.

Tener Confianza en Dios: Debemos recordar que por medio de Cristo, estamos seguros. No hay que desanimarnos, porque Dios, en su misericordia, nos ha encargado este trabajo. Porque aunque estemos llenos de problemas, no estamos sin salida; podemos tener preocupaciones, pero no debemos desesperarnos; podemos ser derribados, pero no pueden destruirnos. Nuestra confianza debe estar completamente en Dios.

Darle la Honra y Gloria a Dios: Pablo no consideraba algo como propio; al contrario, todo lo que podía hacer decía que provenía de Dios, dándole a Él toda la Honra.

Ser siervos de Cristo: No vamos a predicarnos a nosotros mismos, para que los ojos de la gente se pongan en nosotros, sino a Jesucristo como Señor.

Ser luz para otros: Debemos traer esa luz que Dios ha hecho brotar en nuestro corazón, para que podamos iluminar a otros, dándoles a conocer la gloria de Dios.

Estar orgullosos de lo que hacemos: Nunca actuar a escondidas, como si sintiéramos vergüenza.

Ser Sinceros: No falsear el mensaje de Dios. Decir solamente la verdad.

Tener Fe: Debemos tener una actitud de fe: creemos y actuamos.

No desanimarnos: Porque aunque por fuera nos vamos deteriorando, por dentro nos renovamos día a día. Pablo decía que: "Lo que sufrimos en esta vida es cosa ligera, que pronto pasa; pero nos trae como resultado una gloria eterna mucho más grande y abundante. Porque no nos fijamos en lo que se ve, sino en lo que no se ve, ya que las cosas que se ven son pasajeras, pero las que no se ven son eternas".

Demostrar pureza de vida: Esto se demuestra con nuestro conocimiento de la verdad, por nuestra tolerancia y bondad, por la presencia del Espíritu Santo en nosotros, por nuestro amor sincero, por nuestro mensaje de verdad y por el poder de Dios en nosotros.

Ser rectos: Ya que la rectitud es una arma tanto para el ataque como para la defensa.

Ser justos: Con nadie ser injustos; a nadie hacerle daño; a nadie explotar.

Ser Celosos para evitar el pecado: Debemos someter todo pensamiento humano a Cristo, y estar dispuestos a castigar toda desobediencia.

Respetar el trabajo de otros: Dios es quien señala los límites de nuestro campo de trabajo, y no debemos gloriamos de los trabajos que otros han hecho, ni tampoco menospreciarlos porque nosotros no los hicimos.

Ser Instruído: Los conocimientos son buenos, pues aunque no podemos tener todas las capacidades y en ocasiones seamos torpes en el modo de hablar, no hay que serlo en cuanto a conocimientos; ya que eso se demuestra siempre en todos nuestros hechos.

Estas son algunas de las características que debemos buscar tener en el ministerio en el cual nos desenvolvemos, si queremos llegar a ser
como el gran varón que fue Pablo.


abril 21, 2012

La figura de Cristo en el arca de Noé


La figura de Cristo en el arca de Noé
Por: RV Marker
INTRODUCCION

Una de las primeras historias que nos cuentan cuando niños de la Biblia es el Arca de Noé y lo que paso durante el diluvio. Nosotros como niños estábamos tan emocionados sentados al borde de nuestra silla imaginando como hizo Noé ese enorme barco, como llegaron los animalitos formados de dos en dos en orden uno tras otro haciendo fila para entrar.
Nos imaginamos como de repente empiezan a caer unas cuantas gotas de agua, y luego más y más agua, y la gente del pueblo corriendo hacia el arca con su itacate (mochila) en su espalda tratando de conseguir un pequeño espacio en ese gran barco y con la cara de sorpresa al descubrir que la puerta estaba cerrada y todos los pasajes se habían vendido.
Vemos en nuestra mente a otros tratando de subirse a los árboles, o tratando de estar en los lugares más altos para evitar mojarse (como niños recordamos como nos molesta tener que bañarnos a diario y creemos que a esa gente tampoco les gustaría estar toda empapada y tal vez con algo de frío).
También pensamos que cualquiera podría haber sobrevivido si simplemente se hubiera agarrado de un buen tronco que flotara y se aguantara agarrado a él. Y nos imaginamos como deben de haber estado todos dentro del arca, al principio animados y poco a poco aburriéndose porque no había suficiente espacio entre ellos y porque empezaba a oler a que algunos animalitos no se habían bañado antes del viaje, además de que el león olía a rayos y los puerquitos no cantaban tan mal las rancheras. Las aves volando dentro del arca (que bueno que las vacas no vuelan) y los pericos no dejaban de hablar, todo parecía peor que un mercado.

Sin embargo según van pasando los años, y vamos creciendo, esa imaginación se va haciendo más tranquila y ya no hay tanta fantasía en nuestra mente.

Estudiando mas a fondo ese relato de la escuela dominical que tanto nos gustaba, nos damos cuenta de las grandes verdades que contiene, de lo profundo de la historia, de la importancia y relevancia que tuvo en su tiempo, y sobre todo, cómo se parece a lo que Cristo hizo, hace y hará en nuestra vida.
Este pequeño estudio va a tratar de eso específicamente, de encontrar a Cristo (o tipos de Cristo), en el Arca de Noé durante el diluvio. No deseo ser irrespetuoso, pero el usar un lenguaje poco común o algo cómico, es para diferenciar este trabajo, además de que creo que el conocimiento no esta peleado con el humor. Recuerdo cuando estudiaba en la universidad una de las materias más difíciles, me encontré con un libro que en forma divertida y simple explicaba cada uno de los puntos difíciles de esa materia, así que trataré de hacer lo mismo.
Y como dijimos que vamos a buscar 'tipos de Cristo', primero hay que explicar que son los 'tipos'.
QUE SON LOS TIPOS

Según el diccionario bíblico, un tipo es una sombra que proyecta una verdad de la historia del Antiguo Testamento a la realidad o cumplimiento en la revelación del Nuevo Testamento.<1>

Los tipos del Antiguo Testamento incluyen personas, funcionarios, objetos, acontecimientos, ritos, lugares e instituciones que, además de su propio valor significativo, prefiguraban a alguien o a algo por venir.<2>

ALGUNOS TIPOS DE CRISTO EN EL ARCA DE NOE
Existen varios tipos o figuras de Jesucristo en el relato de Noé y el diluvio, algunos de los que vamos a tratar aquí son los siguientes:
* Vino para apacentar
* La maldad de la tierra
* La necesidad de un juicio: el hombre justo
* Dios es quien empieza
* Hay que creer
* La obediencia del escogido
* La gracia
* El diseño
* El medio de salvación: una sola puerta
* ¿Quién cierra la puerta?
* Tres pisos
* El arca flota
* El número 40
* La ventana
* Calafateado
* El sacrificio final
Ahora empezaremos a ver y analizar (con algo de humor cristiano) cada uno de los tipos antes marcados.
VINO PARA APACENTAR
Lamec, padre de Noé, debió de haber escuchado las historias de sus antepasados acerca de la profecía que Dios le dio a Adán con respecto a que algún día vendría uno de sus descendientes a pisotear a la serpiente y se terminaría la maldición. Y como todo buen "papá cuervo" estaba esperando que su "lindo" hijo fuera ese "superman" (super hombre - el escogido) que acabaría con sus sufrimientos.
Gen 5:29 nos dice que al nacer Noé (Consuelo o Descanso), estaban profetizando que él aliviaría toda obra y trabajo de la gente a causa de la maldición de Jehová sobre la tierra.

Así mismo vemos que en Jesús también seria apacentado el pueblo, como lo dijo el profeta Miqueas (Y él estará, y apacentará con poder de Jehová, con grandeza del nombre de Jehová su Dios; y morarán seguros, porque ahora será engrandecido hasta los fines de la tierra.<3>

LA MALDAD DE LA TIERRA
En los tiempos de Noé, el mundo era un caos, la perversión y la maldad estaban en todo lugar (Gen 6:5 "Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal").

También en los tiempos del nacimiento de Jesús las cosas andaban de cabeza, imagínense solamente que el pueblo judío se encontraba dominado por los malvados romanos; no tenían rey (ni reina); los sacerdotes en lugar de ayudarlos para acercarlos a Dios, se la pasaban buscando la forma de hacer su negocito aprovechándose de ellos.

Los tiempos no han cambiado mucho desde entonces. Ahora nos encontramos en una situación parecida: el mundo es un caos, existe maldad en los corazones de la gente, casi cualquier persona esta buscando la forma de sacar provecho de ti, han aparecido enfermedades raras (SIDA) causadas por actitudes raritas, y muchas cosas más. Por eso Dios mandará nuevamente a su Hijo para acabar de una buena vez con todo esto... después de todo eso nos dice Apocalipsis... pero de eso no pienso hablar por ahora (tal vez después cuando tenga que hacer algún trabajito sobre ese libro).

LA NECESIDAD DE UN JUICIO: EL HOMBRE JUSTO
Como lo dijimos en el punto anterior, la maldad era tal que se necesitaba ponerle un "hasta aquí"; pero Dios, en su gran sabiduría, decidió no destruirla por completo y empezar de nuevo, sino que enviaría una destrucción parcial... que eso de parcial estaba de verse, pues realmente destruyo casi todo con la agüita que cayo...
Se necesitaba un hombre justo entre toda la bola de malvados, y ahí estaba Noé (Gen 6:8 "Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová"). Ojo: La gracia es justicia dada (regalada) por Dios, la justicia es por uno mismo.
Al igual con Cristo, para poder redimir a la humanidad del pecado, se necesitaba alguien que fuera justo y solamente Jesús lo era, pues no tenía ninguna mancha del pecado en él (1 Jn 3:5 "Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él").
DIOS ES QUIEN EMPIEZA
Con Noé, fue Dios quien empezó con la platica con Noé y le dijo que tenía que hacer.
Igual pasó con Jesús, es Dios quien lo mandó para hacer la obra. Y como buen hijo, la realizó.
HAY QUE CREER
A Noé no le creyeron cuando le dijo al pueblo que venía una terrible destrucción y que necesitaban entrar al arca para salvarse. Después de todo no llovía mucho en ese tiempo (Gen 2:6 "sino que subía de la tierra un vapor, el cual regaba toda la faz de la tierra"). Pero Noé sí creyó.

Igual con Jesús, Dios lo mandó para que el que crea en él no se pierda y tenga vida eterna, así que también existe la libertad de creer o no en él. Después de todo tampoco en este tiempo se ve que se castigue al que se porta mal y comete pecado... pero cuando llegue el juicio... cuídese el que no creyó, porque va directito al infierno.

LA OBEDIENCIA DEL ESCOGIDO
Noé, a su corta edad de 500 años (para nosotros todo un anciano), recibió la encomienda de construir una enorme arca para poder resguardar en ella a los que se salvarían, y sin importar de las burlas de la gente, ni de lo difícil o pesado del trabajo (nada más le tardo como 100 años construirla), puso manos a la obra y realizó su encomienda.
También Jesús, sin importar lo que dijera la gente (y muchos los trataron de loco - aun su familia), ni de lo doloroso del trabajo (yo creo que a cualquiera le dolería que lo crucificaran), hizo su trabajo según la voluntad del que lo envió.
LA GRACIA
Noé, aunque apareció como justo ante los ojos de Jehová, sabemos que también cometía sus errorcitos, llegó a ponerse "hasta atrás". Así que no era del todo perfecto. Pero por la gracia que tuvo, fueron salvados él y su familia.
Así que si alguno de nosotros quiere salvarse, no va a ser por nuestras obras ni por nuestra justicia, sino por la gracia de Dios a través de Jesucristo que nos vamos a salvar (Rom 3:21 "la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo").
EL DISEÑO
Ni crean que Noé sabia mucho de barcos, y mucho menos era un buen arquitecto o diseñador, pero fue Dios el que le dio los planos y le dijo como hacerlo todo.
Tampoco debemos de preocuparnos mucho de cómo le vamos a hacer para salvarnos, pues Dios nos da la forma para salvarnos (Rom 10:9 "que sí confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo").
EL MEDIO DE SALVACION: UNA SOLA PUERTA
Por medio del arca, y sobre todo por entrar en ella por la única puerta que tenía, fue la única forma de no terminar ahogado (muerto), así el único medio de salvación para evitar terminar muerto (para siempre y pasarla calientito de más en el infierno) es a través de Cristo (Juan 14:6 Jesús le dijo: "Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí").
¿QUIÉN CIERRA LA PUERTA?
Con Noé, fue el mismo Dios quien cerró la puerta y ya no dejó entrar a nadie más. En nuestro tiempo, también Dios va a decidir cuando es el momento del fin, él cerrará la puerta, y el que no haya entrado a tiempo, pues ya ni modo... a quemarse eternamente en el infierno.
TRES PISOS
El arca tenía tres pisos, igual Dios está formado por tres personas (el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo).
EL ARCA FLOTA
El arca, sin importar lo duro que esté todo afuera, se encuentra bien y sobre los problemas (el agua era un buen problema... sobre todo si no sabes nadar).
Cristo es el Arca y la roca firme, y el que está en Cristo vive con más tranquilidad. Nota, dije que vive con más tranquilidad, no que no le llovería y que no le vendrían problemas. Como el ejemplo de los 2 cimientos (Mt 7:24-27 "Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina"), a los dos les llovió, pero el que construyó sobre la roca (que es Cristo) no se le cayó su casa.
EL NUMERO 40
En la Biblia el numero 40 representa el tiempo de prueba o preparación. Encontramos muchos pasajes con este número, pero rápidamente resumimos algunos como sigue:
* 40 días y 40 noches duró la lluvia durante el diluvio
* Durante el éxodo, el pueblo caminó 40 años por el desierto
* Moisés estuvo 40 días en el monte
* 40 días estuvieron los espías reconociendo la tierra
* Jesús ayunó 40 días antes de ser tentado.
LA VENTANA
El arca fue construida con una ventana apuntando hacia el cielo, esto es para recordarnos hacia dónde mirar cuando estemos en problemas, ya que el auxilio viene de nuestro Padre que está en los cielos.
CALAFATEADO
El arca fue cubierta (calafateada) con brea para que no le entrara el agua, así nuestro ser es cubierto (calafateado) con la sangre de Cristo que hace que Dios nos vea como justificados.
EL SACRIFICIO AL FINAL

Cuando Noé salió del arca, levantó un altar y realizó sacrificios (derramando sangre) a Jehová.

Jesús se entrego como un sacrificio vivo a Dios, y en la cruz padeció por nosotros y llevo nuestros pecados y con su sangre fuimos limpiados.
Y PARA TERMINAR: ¿DÓNDE ESTAN LOS PROBLEMAS?
Como dije en la introducción a este estudio en el cuarto párrafo, después de que subieron los animales al arca y empezó el diluvio, al principio todos estuvieron emocionados, pero poco a poco empezaron las fricciones: el león y los puerquitos olían mal, los elefantes querían más espacio, los pericos no dejaban de parlotear, estaba todo oscuro, etc. Parece que aun en el arca existían problemas. Pero hay que ver que los inconvenientes dentro de este enorme barco atestado de sobrevivientes (la mayoría animales) fueron mínimos comparados con las dificultades a las que te enfrentarías por estar fuera de ella.
Así mismo, muchas veces los cristianos nos quejamos de los conflictos internos que vivimos, sin fijarnos que estando fuera de Cristo, nos enfrentamos a un problema mucho mayor que cualquiera de los problemitas (aun acumulados) que estamos pasando. Nos enfrentaríamos a la muerte eterna, al lago de fuego, al lugar de lloro y crujir de dientes, a un sufrimiento eterno.
Así como Noé, que creyó lo que Dios le dijo que hiciera para salvarse, que hizo de acuerdo a los planes divinos, que no se fijó en las criticas de los demás y al final se salvó del tremendo juicio, así mismo debemos ser nosotros: creer en Jesús y seguir los planos dados por Dios para obtener la salvación, aguantar las criticas de los que no creen que viene un juicio final. Y como Noé, también nosotros entraremos en el arca (que es Cristo), y no nos hundiremos en los problemas, y saldremos victoriosos del juicio que vendrá sobre la tierra, y obtendremos la salvación y vida eterna.

BIBLIOGRAFÍA
Santa Biblia, Versión Reina Valera 1960, Sociedades Bíblicas Unidas, Gran Bretaña, 1969
Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia, Editorial Caribe, EUA, 1998
DeHaan, M. R. Portraits of Christ in Genesis (Cuadros de Cristo en Génesis), Zondervan Publishing House, Grand Rapids, Michigan EUA, 1966

CITAS USADAS1 Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia, Editorial Caribe, p.1144
2 Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia, Editorial Caribe, p.1144
3 Miqueas 5:4

La figura de Cristo en el arca de Noé, RV Marker

Un comparativo del liderazgo de Saúl, David y Absalón.


Un comparativo del liderazgo de Saúl, David y Absalón.Por: RV Marker
IntroducciónCuando escuchamos la palabra líder, inmediatamente nos imaginamos al caudillo que lleva el estandarte al frente de la batalla, al gran guerrero que tiene esa voluntad férrea de seguir aún más allá de sus fuerzas, al hombre con un poder y una atracción especial al que todos tratan de alcanzar, al hombre que toma decisiones sabias y que nunca se equivoca.
Cuando hablamos de liderazgo, una de las cosas que nos preguntamos es si nosotros podemos ser ese gran caudillo al frente de la batalla, o si somos ese guerrero con fuerza y voluntad inquebrantables y si hay gente que quiera seguirnos, o si tomamos decisiones acertadas en todo tiempo.
Casi siempre la respuesta es un: No, yo no puedo ser como ellos, ellos son especiales, ellos nacieron así, ellos tienen un poder sobrenatural, ellos nunca se equivocan, ellos saben lo que hacen, ellos son...¡ellos! Y yo no soy así.
Bueno, vamos a analizar el liderazgo de los 3 primeros reyes de Israel y trataremos de aprender sobre sus virtudes, sobre sus fuerzas y también, por qué no, sobre sus debilidades, y entonces podremos decidir qué tipo de líderes somos o a qué tipo de líderes queremos seguir.AntecedentesHaciendo un resumen rápido de la formación y la historia del pueblo hebreo, podemos decir que este pueblo nació con la promesa que Dios le hizo a Abraham en Génesis 12:2 y que se repite más adelante en Génesis 22:17 "de cierto te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que está a la orilla del mar; y tu descendencia poseerá las puertas de sus enemigos."
Abraham, después de desesperarse un poco por el tiempo que tardaba la promesa en hacerse realidad (aprox. 12 años), cometió un error al tratar de "ayudar" a Dios a cumplir la promesa, y tuvo 2 hijos, Ismael (que fue el hijo del error) e Isaac (que fue el hijo de la promesa).
Isaac se casó y fue padre de un par de mellizos: Esaú (el mayor) y Jacob (el menor de ellos). Esaú cometió varios errores, al vender su primogenitura a su hermano y casarse con varias mujeres, entre otras cosas.
Jacob, cuyo nombre después fue cambiado por el de Israel, huyó de su hermano, se casó con 2 mujeres y a través de ellas y de sus 2 concubinas tuvo 12 hijos, que no fueron muy bien educados durante su juventud, pues vendieron a José, uno de sus propios hermanos a unos mercaderes que a su vez lo vendieron en Egipto.
José batalló por varios años, pues de estar en un buen trabajo fue encerrado injustamente en la cárcel, mas terminó siendo gobernador de todo Egipto: el segundo al mando. Al mismo tiempo, en tierra de Israel, empezaron a sufrir del hambre y los hermanos de José fueron enviados a Egipto para conseguir alimento.
José, después de confirmar con algunas pruebas el cambio en el corazón de sus hermanos, los invitó a vivir en Egipto, y todos se fueron con José. En ese momento eran solamente 75 personas.
Durante 400 años vivieron en Egipto, o mejor dicho, sobrevivieron bajo la esclavitud de un malvado faraón que no conoció de José y de las cosas que había hecho por Egipto. Entonces, gracias a Moisés y sobre todo a la mano poderosa de Dios, el pueblo salió de Egipto rumbo a la tierra prometida.
Pero este era un pueblo con mente de esclavos, siempre se quejaban de todo, nunca veían el poder de Dios que los acompañaba, y tampoco creyeron la promesa de poseer una tierra que destilaba leche y miel. Lo único que podían ver eran gigantes y los israelitas se comparaban como pequeñas langostas junto a ellos.
Dios los mantuvo 40 años dando vueltas por el desierto para esperar el surgimiento de una nueva generación, la cual nunca hubiera estado en cautiverio, cuya mentalidad estuviera en la promesa. Y fue hasta entonces que con la guía de Josué, entraron y conquistaron la tierra prometida.
Se dividieron la tierra y habitaron en ella de acuerdo a la tribu de la que descendían. Nombraron jueces que los gobernaron, y principalmente los liberaron de los ataques de sus enemigos. Hasta que se cansaron de los jueces y pidieron un rey.
El ultimo juez fue Samuel, y cuando Samuel envejeció, el pueblo le pidió un rey (1 S 8:4-6 "Entonces todos los ancianos de Israel se juntaron, y vinieron a Ramá para ver a Samuel, y le dijeron: He aquí tú has envejecido, y tus hijos no andan en tus caminos; por tanto, constitúyenos ahora un rey que nos juzgue, como tienen todas las naciones. Pero no agradó a Samuel esta palabra que dijeron: Danos un rey que nos juzgue. Y Samuel oró a Jehová")
Dios, a través de Samuel le informó al pueblo como sería el rey (1 S 8:11-18 "Dijo, pues: Así hará el rey que reinará sobre vosotros: tomará vuestros hijos, y los pondrá en sus carros y en su gente de a caballo, para que corran delante de su carro; y nombrará para sí jefes de miles y jefes de cincuentenas; los pondrá asimismo a que aren sus campos y sieguen sus mieses, y a que hagan sus armas de guerra y los pertrechos de sus carros. Tomará también a vuestras hijas para que sean perfumadoras, cocineras y amasadoras. Asimismo tomará lo mejor de vuestras tierras, de vuestras viñas y de vuestros olivares, y los dará a sus siervos. Diezmará vuestro grano y vuestras viñas, para dar a sus oficiales y a sus siervos. Tomará vuestros siervos y vuestras siervas, vuestros mejores jóvenes, y vuestros asnos, y con ellos hará sus obras. Diezmará también vuestros rebaños, y seréis sus siervos. Y clamaréis aquel día a causa de vuestro rey que os habréis elegido, mas Jehová no os responderá en aquel día."), pero al pueblo no le importó, ellos querían un rey.El nombramiento del primer reyPara escoger a nuestros gobernantes, lo primero que vemos es su capacidad, sus planes, y todas las características que tiene una persona para que nos pueda gobernar sabiamente. Sin embargo para escoger al primer rey de Israel las cualidades buscadas fueron otras. 1 S 9:2 nos dice como era ese futuro rey "Y tenía él un hijo que se llamaba Saúl, joven y hermoso. Entre los hijos de Israel no había otro más hermoso que él; de hombros arriba sobrepasaba a cualquiera del pueblo"
Las principales cualidades que tenia Saúl eran su juventud, hermosura y estatura. Esas parecían ser todas sus cualidades, pues ni siquiera pudo encontrar a unas asnas perdidas (1 S 9:3-5). Aunque parezca extraño, como quiera el que escogió al rey fue Dios.
Parecería que Saúl no sería un buen rey, pero eso lo analizaremos mas adelante.El segundo reyNormalmente al hijo menor se le considera una persona informal y consentida. Se espera poco de él, y revela pocas características de liderazgo, porque nunca guía. No hay quien lo siga; por el contrario, a él siempre le toca seguir.
Cuando Samuel llegó a ungir a David, su familia nunca se imaginó que podría ser elegido, así que lo dejaron cuidando a las ovejas (1 S 16:11 "Entonces dijo Samuel a Isaí: ¿Son éstos todos tus hijos? Y él respondió: Queda aún el menor, que apacienta las ovejas. Y dijo Samuel a Isaí: Envía por él, porque no nos sentaremos a la mesa hasta que él venga aquí."). David llegó y Samuel, el mismo que ungió al primer rey, lo ungió, y desde aquel día el Espíritu de Dios vivió sobre David.David y Saúl se conocenSaúl cometió algunos errores que hicieron que el Espíritu de Jehová se apartara de él, de tal forma que vivía atormentado. Sus criados le sugirieron que mandara traer a un músico que le ayudara en su angustia, y de esta manera fue traído David.
David tocaba su arpa y Saúl se aliviaba (1 S 16:23 "Y cuando el espíritu malo de parte de Dios venía sobre Saúl, David tomaba el arpa y tocaba con su mano; y Saúl tenía alivio y estaba mejor, y el espíritu malo se apartaba de él.").David y GoliatLos filisteos, comandados por un enorme gigante de casi 3 metros llamado Goliat atormentaban al pueblo, pues pedían que la guerra se decidiera en una batalla entre él y un hombre de Saúl. David fue al campo de batalla para llevar de comer a sus hermanos, y se molestó por las provocaciones de este filisteo. Sin importarle que ni siquiera era un soldado, se enfrentó contra ese enorme guerrero sólo con su honda, su cayado y 5 piedras, y con lo mas importante: la confianza de que Dios lo libraría de ese filisteo.
Con un tiro de su honda, David hirió al filisteo y lo mató, y yendo sobre él, con la propia espada de Goliat le cortó la cabeza. Al ver esto, todo el ejercito filisteo salió huyendo, pues su paladín y gran guerrero había sido derrotado.El triunfo o los problemas1 S 18: 6-9 "Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música. Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían: Saúl hirió a sus miles, Y David a sus diez miles. Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles, y a mí miles; no le falta más que el reino. Y desde aquel día Saúl no miró con buenos ojos a David."
El rey Saúl era la estrella de su época, el primer potentado de su hora, el hombre más respetado en el reino. Era el elegido de Dios y la bendición para Israel. Saúl se sintió amenazado por David. Sin embargo, David lo admiró tanto que aun cuando el pecado de Saúl socavó su propósito, David continuó respetándolo por lo que había sido. Saúl era el rey y el joven David había dado muerte al gigante para él. Sin embargo, no importa cuánto admiró y respetó David a Saúl, nada pudo alterar el gran propósito de Dios.
Saúl no era del todo malo; simplemente no pudo aceptar cambios. Su gran tragedia es compartida por millones de hombres hoy día: ¡la incapacidad de decir adiós a la fuerza que se despide! No debemos permitir que el orgullo nos robe vida y fortaleza sobre todo cuando por debajo de nosotros hay un joven popular y que promete. Saúl no sabía si David subiría al trono por medios fraudulentos o por medios legítimos, y eso enloquecía a Saúl. Es por eso que hay que gozar cada etapa de la vida y cuando Dios dice: "Libéralo!" ¡entonces dárselo todo a él!
Saúl luchaba con los antojos de la gente. Estaba acostumbrado a sus alabanzas, pero la multitud que una vez rugió por él ahora aplaudía a otro. El enemigo con frecuencia usa nuestro yo en contra nuestra cuando pasamos por la puerta de una etapa a la otra.
Tan grandes fueron los celos de Saúl por David que un día Saúl trato de matar a David con una lanza. Sí, el rey podía arrojarle lanzas a David porque era el rey.
Mientras más crecía la locura de Saúl, más crecía David en conocimiento, y ¿qué se hace cuando alguien nos arroja una lanza? Podemos regresarla y entonces probaremos que: somos intrépidos, defendemos lo recto, nos oponemos valientemente al mal, somos firmes y no se nos puede hacer a un lado, no soportaremos la injusticia o el trato injusto, somos los defensores de la fe y no seremos injuriados injustamente.
Pero David esquivó la lanza, y no la regresó. Simuló que no veía las lanzas, aprendió a evitar rápidamente el golpe y aparentar que nada había sucedido.
¿Quién tenía la razón?¿Era este hombre el ungido del Señor? Sólo Dios podía saberlo. Saúl se resistió a lo inevitable, y derrochó sus últimos años tratando de matar al joven que más había admirado porque tuvo celos que Dios hubiese escogido a David para que lo sucediera en el reino.
David fue atacado por Saúl, pero lo único que Saúl consiguió fue matar al Saúl que David llevaba dentro. David tenía que ser humillado para no pasar por lo mismo. Todo su ser interior fue mutilado. Su personalidad fue transformada y cuando la prueba terminó, David era apenas reconocible.
¿Cuándo apartarse de alguien como Saúl? Saúl mismo lo propició cuando dijo "Captúrenlo y mátenlo como a un perro". Sin embargo David no dividió al reino cuando salió. No se llevo parte de la población con él, salió solo.
Los hombres se obstinaban en acompañar a David. Estaban dispuestos a ayudarlo a fundar el reino de "Saúl II". Pero David había aprendido que tales hombres "nunca" se atreven a salir solos. Por tanto, David se fue solo.De la caída al levantamientoDavid huyó a las cuevas, que no son el mejor lugar para levantar el animo de uno. Pero al alabar en esos momentos, las paredes de la cueva repetían su canto y entonces sin saberlo David, no solo se consolaba a sí mismo, sino que se convirtió en el consolador de todos los que en algún momento hemos sufrido o nos hemos sentido perseguidos, pues al leer los salmos que David cantaba, nuestras fuerzas regresan y nuestro espíritu entra en armonía con el Espíritu de nuestro gran Dios.
David estaba en el peor momento de su vida, tenía menos de cuando empezó como pastor. David fue a un país extranjero con un grado mínimo de seguridad pues él había derrotado a su gran guerrero llamado Goliat y siempre habría alguien que hubiera querido vengarse.
También ahí fue temido y odiado, se inventaron mentiras y hubo confabulaciones contra de él. Se enfrentó a la muerte en varias ocasiones y tuvo que hacerse pasar por loco en algunas ocasiones para poder salir vivo.
El sufrimiento generaba la humildad. Sin embargo, de acuerdo con las normas terrenales, era un hombre frustrado; de acuerdo con la norma del cielo era un hombre quebrantado de corazón.
Otros tuvieron que huir a medida que aumentaba la locura del rey Saúl. Y al encontrarse con David lo quisieron seguir, pero él no les pidió que lo siguieran. No compartía la actitud de esos hombres. Sin embargo, sin pedírselo, ellos comenzaron a seguirlo, y al estar con este nuevo David, empezaron a cambiar paulatinamente sin que se los ordenaran y así nació la verdadera monarquía.
David pudo matar a Saúl en varias ocasiones, tuvo la oportunidad, pero no quiso caer en las mismas actitudes que Saúl tenía, para no ser como él: no permitió el odio en su corazón.Lo único constante, es el cambioCon lo que hemos leído, podría parecer que Saúl era de lo peor, sin embargo Saúl fue de los más grandes personajes de la historia:
* Fue bautizado en el Espíritu Santo* Venía del linaje de Abraham* Integró un reino dividido* Formó un ejercito y derrotó al enemigo* Fue profeta* El Espíritu de Dios vino sobre él con poder y autoridad.A Saúl se le dio la autoridad de Dios, era el ungido de Dios y Dios lo trataba como tal.
Pero a Saúl lo consumía la envidia, fue capaz de asesinar y estuvo dispuesto a vivir en las tinieblas espirituales. Algo que Saúl olvidó es que las fuerzas se acaban, y que no viviría para siempre. Saúl actuaba como si fuera a ser rey para siempre.
Si a nosotros nos duele escuchar a la multitud cada vez que aclama a otro que no sea uno mismo, entonces no estamos preparados ante las señales de cambio. ¡Si no hemos aprendido a estar orgulloso de contribuir con nuestra fuerza al éxito de algún otro como lo hace un buen entrenador, entonces estamos sufriendo el "síndrome de Saúl"! Al final, Saúl lo perdió todo porque no quiso moverse cuando Dios dijo que el tiempo había llegado. ¡Es una pena que se arruinen éxitos previos por no entender de quién es el turno en el escenario!
David no cayó en este error, si vemos 2 S 21:16-17 ("E Isbi-benob, uno de los descendientes de los gigantes, cuya lanza pesaba trescientos siclos de bronce, y quien estaba ceñido con una espada nueva, trató de matar a David; mas Abisai hijo de Sarvia llegó en su ayuda, e hirió al filisteo y lo mató. Entonces los hombres de David le juraron, diciendo: Nunca más de aquí en adelante saldrás con nosotros a la batalla, no sea que apagues la lámpara de Israel."). La fuerza de David se estaba acabando.
La juvenil energía de David aterrorizaba e intimidaba a sus enemigos en los primeros años, pero el tiempo cambia las cosas. David descubrió que su fortaleza original y su llamado habían cambiado. Ya no era necesario ni estaba equipado para luchar como un guerrero. Él seguía siendo necesario, pero ahora como rey. Sus armas eran la sabiduría y la unción de Dios, no la espada y el escudo.
¿Quién quiere emplear a alguien al que le falta flexibilidad? ¿Quién necesita un empleado que no quiere reentrenarse o adaptarse a los tiempos y necesidades? ¿Quién espera algo de un general de huesos quebradizos que transporta pesadas cajas de municiones en el fragor de la batalla cuando puede lograr mucho más en un puesto de mando, dirigiendo hábilmente a los jóvenes y a los fuertes con su sabiduría de cabellos blancos?
Debemos tener cuidado en amar al Dador de nuestras tareas más que a las tareas. ¡Deberemos amar a Dios más que cualquier cosa que nos haya encomendado hacer! A la larga, llegará el día en que él no nos pedirá más que lo sirvamos de esta manera. No permitamos que nuestro trabajo, nuestro matrimonio o nuestro ministerio nos roben nuestro caminar con Dios, porque todo está sujeto a cambio.
Aprendamos de los errores de David. En el ardor de la batalla, él trató de matar un gigante igual como lo había hecho siempre en el pasado. Se impresionó cuando se dio cuenta que estaba comenzando a sufrir del "síndrome de Saúl". Su carácter y moral estaban intactas, pero había fallado en admitir las diferentes etapas en su vida, y eso casi fue fatal para él. Solamente la rápida intervención de un joven guerrero le salvó la vida.
David reconoció que ya no hacía falta que matase gigantes, había hombres jóvenes que podían hacerlo por él. ¡Un liderazgo excelente siempre llega a ser por sí mismo una tarea! Deberíamos estar entrenando y enseñando todo el tiempo hasta el día en que demos el paso de la labor a la recompensa.
El estancamiento es el enemigo del progreso. Sigamos avanzando. Cuando aprendamos el arte de delegar, empezaremos a experimentar grandes cosas. La gente se aferra a algo cuando no espera nada más.El tercer reyDavid, aunque hasta el momento parecía ser un magnifico rey, también cometió sus equivocaciones y pecados, pues se metió con la mujer de otro y llegó a matar para ocultar su pecado.
Uno de los hijos de David era Absalón, el cual mató a uno de sus hermanos para limpiar la deshonra de su hermana, por lo que tuvo que huir. Pero gracias a Joab y a un ardid que le preparó a David, consiguió el perdón para Absalón y éste regresó a su casa, aunque no vio el rostro del rey David por más de 2 años.
Absalón hacía sentir bien a la gente que lo rodeaba, era de hermoso semblante y no había ningún defecto en él. Absalón era perspicaz. Podía adentrarse en lo profundo de cualquier problema. Cuanto más conversaba el pueblo con Absalón, tanto más comprendían que había cosas fuera de lugar en el reino, cosas incorrectas en las que nunca antes habían pensado.
Absalón era sincero y ambicioso. Era probable que se propusiera hacer las cosas buenas que decía, pero su ambición perduraría mucho tiempo después que descubriera su ineptitud para cumplir lo que prometía. Absalón no vaciló en dividir el reino de Dios, y buscó servidores. Mientras el tiempo pasa la conducta del líder revela mucho acerca del líder.La historia se repiteAbsalón fue en contra del reinado de David: quería ser rey y se proclamó rey. David no trató de defenderse, pues en cierto sentido amaba a su hijo y no quería levantar su mano contra él. Además de que había aprendido lo que Saúl no aprendió: que algún día él dejaría de ser rey.
La autoridad de Dios no teme a quienes la desafían, ni se defiende (humanamente) ni le importa un ápice si ha de ser destronada. David pidió, al igual que Moisés con Coré, que Dios dijese cuál era su voluntad. Y Dios contestó.
Empezó la guerra, el pueblo contra el pueblo, Absalón contra David, pero Dios es fiel e hizo su justicia. Absalón enredó su cabello en una rama de encina, y Joab, el hombre que en un momento pidió por el perdón de Absalón ante David, fue el hombre que le clavó 3 dardos en el corazón a Absalón y lo mató. El reinado de David permaneció hasta que el rey envejeció y entregó su reino en manos de un sucesor digno de continuarlo.ConclusiónHemos visto como empezaron y algunos episodios de la vida de los 3 primeros reyes de Israel; algunos de sus logros, y también algunos de sus errores.La grandeza de David consistió en que:
* Nunca amenazó* Tenía una vida de sumisión, enseñó la sumisión, no la autoridad* Los hombres que insisten en la autoridad sólo prueban que no tienen ninguna* No tenía ninguna rebelión porque no le importaba si lo destituían* Enseñó a dar, no a quitar
David confiaba en Dios, y no quería ser como Saúl.
Dios quiere que su pueblo adquiera su riqueza y pase su sabiduría de generación en generación. Que el padre prepare a su hijo. Que el pastor prepare a su sucesor. Cuando nosotros nos atrevamos a relacionarnos con la generación futura, ¡entonces siempre seremos una parte de su éxito en vez de estar impresionados por él o temerosos de él! Y podremos dirigir en cierta manera a la generación que ocupará nuestro puesto para que lo haga de una manera digna y continuando con las metas y propósitos que se establecieron originalmente.
Todos estamos actuando sobre un escenario y estamos parados bajo la luz de los reflectores, pero a la larga oiremos los aplausos dados a otro. La multitud se reduce y el aplauso se desvanece, ¡pero debemos comprender que el alejamiento de la multitud no significa el alejamiento de Dios! Los papeles cambian y los trajes se modifican porque el escenario está siempre sobre ruedas. El mundo sigue avanzando, y los papeles principales cambian de vez en vez, pero algunas cosas siempre siguen siendo las mismas: La debilidad de los hombres, el poder de Dios y el continuo cambio de escenario. Si comprendemos la etapa en la que estamos, el cambio se hace fácilmente e inclusive es deseable.
Cualquier joven rebelde que alza su mano contra uno a quien considerara un Saúl, o cualquier rey anciano que trate de defenderse de un ataque de un posible sucesor pudiera, en realidad, estar alzando su mano contra la voluntad de Dios.




Bibliografía utilizada:
* ¡Desatad a ese hombre y . . . Dejadle ir!, T.D. Jakes, Editorial Unilit
* Perfil de tres monarcas. Gene
* Biblia Reina Valera 1960, Sociedades Bíblicas en América Latina.