diciembre 19, 2011

Los que tienen hambre y sed.

¡Hambre y sed!¿quién desea tener hambre o sed?¿Qué hay de bueno en esto?El razonamiento humano nos diría que una vida tranquila y la abundancia de bienes nos traen felicidad y dicha.Consideramos dichosas a aquellas personas que gozan de la abundancia.Pero,¿hambre y sed?.Estas palabras más bien pintan un cuadro de sufrimiento y necesidad desesperante.Nos hace pensar en los mendigos,los barrios pobres de las ciudades grandes,y en países enteros donde dominan el hambre y la necesidad.Es una condición que tratamos de evitar a toda costa.
Pero¿sabes ?Jesús lo veía de manera muy diferente cuando declaró:"Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia,porque ellos serán saciados":Las personas dignas de formar parte del reino de Dios son solamente aquellas personas que sienten su necesidad  urgente de Dios;son tales los que hallan la dicha y la satisfacción que verdaderamente llena y perdura.Analicemos lo que significa esto para nosotros.
En el Salmo 42:1-2 vemos una comparación que explica claramente lo que sucede cuando el hombre siente el hambre y la sed de Dios.Dice así:"Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas,así clama por ti,oh Dios,el alma mía.Mi alma tiene sed de Dios,del Dios vivo;¿Cuándo vendré,y me presentaré delante Dios?".En estos versículos vemos el cuadro de un ciervo en el desierto,quizá huyendo de los lobos que lo persiguen.Ya agotado,el ciervo brama,mientras busca con ansiedad el arroyo donde pueda satisfacer la tremenda sed que siente.Este cuadro ilustra la condición de urgencia y desesperación que Jesús considera dichosa.
Las palabras "brama" y "clama" en este salmo se traducen de la misma palabra hebrea en el texto original.Sin duda,el salmista conocía bien ese bramido del ciervo,y desde lo profundo de su alma brotaba el mismo clamor por satisfacer su propia sed.Su alma sentía una necesidad desesperada de algo específico.Ese "algo"que él tanto deseaba era la presencia de Dios que sacia el alma.
EL hambre y la sed no sólo nos hacen clamar,sino que también nos impulsan a buscar con esmero lo que nos pueda saciar.La necesidad de encontrar alimento nos desvela en la noche y nos hace madrugar.Sabemos que nos espera la muerte si no hallamos lo que satisface esta necesidad.
Me hace recordar un incidente que sucedió hace ya unos años.En el año 1972,un avión de la Fuerza Aérea Uruguaya sufrió un percance aéreo cuando se estrelló en las alturas andinas,cerca de la frontera entre Argentina y Chile.Durante muchos días,los sobrevivientes se unieron en su lucha por vencer las inclemencias del frío severo,la nieve,y el hambre.Después de acabarse las escasas golosinas que encontraron entre el equipaje de los pasajeros,empezaron a comerse el cuero de las valijas.Rompieron los asientos de la aeronave y se comieron la paja que encontraron dentro de ellos.Por fin llegó el día en que el hambre aguda los llevó a una desesperación extrema y acordaron comerse la carne de sus compañeros fallecidos.Este acontecimiento muestra hasta qué extremo llega el ser humano en su afán por satisfacer lo que llamamos "el hambre".

¿Qué habría sucedido si aquellas víctimas del accidente aéreo no hubieran tenido hambre?No hubieran sobrevivido.
La mayoría de los pasajeros formaban parte de un equipo de rugby que estaba viajando para jugar en un partido.¿Por qué no invirtieron su tiempo y sus energías en practicar su deporte?¿Por qué no se dedicaron a  la búsqueda de diversión,placeres,y otras actividades que,bajo circunstancias normales quizá hubieran procurado con esmero?.En su condición,lo más importante era proveer  alimento para el cuerpo.Era un asunto de vida o muerte.Las cosas que en otro tiempo hubieran dominado su atención,ahora no significaban nada en vista de la necesidad apremiante que enfrentaban.
Volviendo a lo que dijo Jesús,hagámonos la pregunta.¿son nuestra hambre y sed de Dios tal que haríamos cualquier cosa para conservar la bendita satisfacción de su presencia en nuestra vida?¿O nos encontramos sumidos en el conformismo y la tibieza a tal punto que apenas sentimos la grave falta de esta bendición?Jesús nos dice:"Pedid...buscad...llamad..."(Mateo 7:7).Pedro nos dice:"Desead,como niños recién nacidos,la leche espiritual"(1 Pedro 2:2)(mateo 6:33.Colosenses 3:1).
Jesús nos sigue diciendo que debemos sentir hambre y sed por la justicia?Si por naturaleza el ser humano hace todo lo posible por evitar una condición de necesidad extrema,y lo tiene como una desgracia o vergüenza,¿por qué Jesús se refiere a esta condición como algo deseable?.Volvamos a nuestro texto en Mateo 5:6 para encontrar las respuestas a estas preguntas.
Hambre y sed de justicia.¿Qué es "justicia"?Esta palabra tiene varios significados en la Biblia.En este caso s refiere a lo que es recto o lo que es totalmente conforme a la voluntad de Dios y conforme a su propio carácter.Jesús quiso mostrarnos que la búsqueda de justicia de Dios,su rectitud y su voluntad para nosotros,es la cosa más noble e importante en la vida.No solamente es lo más noble en la vida,Dios promete satisfacción a aquél que tiene hambre y sed de justicia .Recuerde,sin agua el ciervo en el desierto se muere;sin alimento los pasajeros de aquel avión no hubieran sobrevivido;y sin justicia el alma nunca se sacia y no puede sobrevivir.
Hay otra razón por que el hambre y la sed de justicia son tan importantes y deseables.La Biblia nos enseña claramente que es un paso esencial e imperativo para entrar en el reino de Dios.Lucas 15:16-17 nos describe la condición extrema en que se encontraba el hijo pródigo.¡Qué impulsó a este joven a tomar la decisión de volver a su padre?El hambre extrema.En vista de la necesidad apremiante que él sentía por comida,los otros deseos carnales que había creído tan importantes se desvanecieron.
Además de ser un paso importante para entrar en el reino de Dios,un deseo ardiente por la justicia también es imperativo para lograr crecimiento en la vida cristiana(1Pedro 2:2).La palabra "desear "tal como se utiliza aquí significa un impulso interno y un deseo ansioso.Pero el enemigo de nuestra alma se ha dedicado a inventar alternativas para saciarlo.Él sabe muy bien que el que se sacia de la justicia,vivirá.Él sabe también que cualquier otra alternativa es un engaño cuyo fin es muerte.Las riquezas,los placeres,la fama,el sexo ilegítimo,las diversiones,y tantas cosas más parecieran satisfacer,pero son engañosas porque nunca pueden satisfacer la necesidad,pero son engañosas porque nunca pueden satisfacer la necesidad verdadera del alma.En realidad,no hacen más que aplacar un poco el hambre y la sed de justicia,pero no pueden sustentar.

Veamos algunas cosas que pueden aplacar el apetito espiritual:
1.El niño que constantemente come golosinas y dulces pierde el apetito de la comida sólida y buena que de veras alimenta.tal niño no gozará de la misma salud como aquel que se alimenta de comida sólida y nutritiva.De la misma forma,si en nuestra vida espiritual nos alimentamos con cosas que nos hacen perder el apetito del alimento espiritual ,nuestra vida sufrirá y flaqueará.Si nuestro enfoque está en lo terrenal,lo espiritual pierde su atractivo.

2.Cuando enfermamos,muchas veces la comida no nos llama la atención.A veces resulta repugnante,y el simple hecho de pensar en comida nos provoca náuseas.Así también cuando estamos enfermos espiritualmente,perdemos el apetito.No hay en nosotros un deseo fuerte de buscar las cosas de Dios.Más bien,perdemos todo interés y deseo por el alimento espiritual,e inmediata mente la vida va hacia abajo moralmente.Cuando enfermamos,buscamos soluciones para nuestros problemas de salud.Pues,si no lo hacemos,podemos morir por falta de alimento.Así es también en la vida espiritual.No podemos existir por mucho tiempo sin el alimento espiritual.La enfermedad espiritual tiene varias causas,aunque muchas veces tiene su raíz en algún pecado encubierto.El pecado no permite que la vida espiritual florezca.

3.En apocalipsis nos advierte en contra de la tibieza;una condición que para Dios es sumamente repugnante(Apoc 3:14-22).La persona tibia espiritualmente ha descuidado su relación con Dios.Ha perdido el amor ardiente y ferviente con que se empezó la vida cristiana.En esa condición,se pierde el apetito de las cosas de arriba,,el hambre y la sed de justicia.La Biblia nos enseña que Dios no puede aceptar la tibieza.Por lo tanto,debemos arrepentirnos de tal condición y volver a Dios con entusiasmo y solicitud.Nos debe alarmar si vemos que nuestra vida ha entrado en una condición de tibieza,porque Dios dice que él tendrá que vomitar...expulsar a la persona que continúa en esa condición.

El salmista David experimentó esta hambre y sed de Dios.En sus salmos él expresa sus sentimientos."Dios,Dios mío eres tú;de madrugada te buscaré;mi alma tiene sed de ti,mi carne te anhela,en tierra seca y árida donde no hay aguas,para ver tu poder y tu gloria,así como te he mirado en el santuario".(salmos63:1-2).Es impresionante el empeño de David en buscar a Dios.De madrugada;temprano en la mañana antes de emprender cualquier otra actividad,él buscaba su dirección.Sobre todo,David deseaba el favor de Dios en su vida.Su objeto primordial y supremo era Dios.Cuando despertaba,pensaba en Dios.Buscaba a Dios en el tiempo más adecuado.Antes que cualquier otra cosa,su enfoque en la vida era la búsqueda de Dios.la sed que tenía era fuerte,vehemente.La búsqueda de Dios era su prioridad.
Volvamos una vez más a las palabras de Jesús:"Los que tienen hambre y sed de justicia...,serán saciados".Jesús prometió que todo el que busca,hallará(Mateo 7:8).Esta promesa es,cuando menos,para dos clases de personas:
Pero el hombre pecó,y por consecuencia fue separado de Dios.Ahora se originó en el hombre un vació que sólo Dios mismo con Su Espíritu podía llenar.La promesa de Jesús en Mateo 5:6 y Mateo 7:8 es para todos aquellos que están separados de Dios y sienten su profunda necesidad de él.Es para aquellos que desean que Dios mismo llene el vacío en su vida. Jesús dice que el que busca"la justicia" de Dios con sinceridad,la hallará y será saciado.
también el creyente que le ha entregado su vida a Dios y sigue en las pisadas del señor Jesucristo,necesita constantemente el alimento espiritual.La promesa de ser "saciados" es para el creyente que "busca primeramente el reino de Dios",y "tiene hambre y sed" para la alimentación y la presencia de Dios en su vida.Jesús dice que esa persona encontrará satisfacción.Hallará lo que necesita.
¿Podemos entender lo que  a primera vista parece una contradicción:la bienaventuranza de sufrir hambre y sed?.la promesa de la Palabra de Dios se cumple únicamente cuando estamos en esta condición de necesidad.Por eso decimos que constituye una condición deseable y bienaventuranza.Para ser saciado,es necesario buscar ansiosa,ferviente,y diligentemente.Esa búsqueda debe ser primordial en nuestra vida;lo que nos impulsa por encima de todo lo demás.dios busca en todo ser humano un corazón humilde que reconoce su necesidad.Él desea saciar el fuerte deseo que sentimos por él.Desea darnos el alimento y la bebida espiritual que necesitamos.
¿Tiene usted,querido lector,"hambre y sed de justicia"?¿está experimentando la llenura y la satisfacción que Dios ofrece?¿O hay algo que le está quitando el apetito?Dios desea que usted disfrute de la plenitud de Cristo en su vida.hoy la puede disfrutar.

Duane Nisly.



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